Desde la Fórmula 1 hasta los coches de carreras, pasando por las carreras de aceleración y los rallyes de época, el automovilismo es un deporte rápido y emocionante. También es muy accesible, con cientos de eventos variados que se celebran cada año.
Lamentablemente, puede ser demasiado fácil volver a casa con un montón de fotos insulsas y decepcionantes que no transmiten esa sensación de emoción y adrenalina. Esto suele deberse a una combinación de equipo inadecuado y falta de planificación.
Afortunadamente, estos dos defectos pueden solucionarse, y hay una serie de cosas que puedes hacer para mejorar tus imágenes de deportes de motor. Téngalas en cuenta la próxima vez que asista a un evento y aumentará sus posibilidades de obtener unas fotos de automovilismo realmente impresionantes.
Qué necesitas
Una cámara réflex digital o de película es esencial para una buena fotografía de deportes de motor. Intentarás fotografiar algunos coches o motos que se mueven muy rápido, por lo que necesitas una cámara que pueda reaccionar al instante, en cuanto pulses el botón del obturador. El retardo del obturador de las cámaras compactas digitales no está a la altura.
Casi tan importante como la cámara es el objetivo que utilices. A no ser que estés en un evento de automovilismo a muy pequeña escala, lo más probable es que no puedas acercarte al circuito, así que necesitarás un teleobjetivo (de 300 mm o más) para poder llenar el encuadre adecuadamente.
Un trípode o un monopié es un elemento muy útil. Es probable que pases mucho tiempo de pie, con la cámara preparada, esperando a que pase un coche o una moto, y sostener la cámara con la mano puede hacer que te duelan los brazos. Si utilizas un trípode o un monopié, podrás apuntar con la cámara a la parte adecuada de la pista y relajarte un poco hasta que llegue un coche.
Busca una curva lenta
Puede ser tentador dirigirse a la recta más rápida del circuito con la creencia errónea de que un coche más rápido significa una mejor foto. En realidad, sólo hace que sea más difícil capturarlo, y el desenfoque por movimiento también se convierte en un problema.
Para tener una oportunidad de conseguir buenas fotos, busca una curva lenta. Así tendrás más tiempo para hacer la foto y reducirás los problemas de desenfoque por movimiento. También puede hacer que la toma sea más emocionante, con las ruedas del coche girando mientras rebota sobre los bordillos, o la moto inclinándose en la curva.
Ajusta el enfoque
Incluso en una curva lenta, el enfoque automático de tu cámara tendrá dificultades para seguir el ritmo de los vehículos, así que lo mejor es cambiar al modo manual y enfocar el punto de interés en la pista, normalmente cerca del vértice de la curva. A continuación, simplemente bloquea el enfoque y puedes estar seguro de que obtendrás imágenes nítidas durante todo el día.
Velocidad de obturación
Necesitas una velocidad de obturación rápida para la fotografía de deportes de motor, por lo que este debería ser el ajuste en el que basas todos los demás. Empieza con una velocidad de obturación de alrededor de 1/500 de segundo y experimenta en función de tus resultados. Si ves que tus fotos salen oscuras, prueba a abrir más el diafragma o a aumentar el ISO.
Muévete con la acción
Una buena foto de deportes de motor mostrará el coche o la moto con detalles nítidos, pero con el suficiente desenfoque del fondo para transmitir una sensación de velocidad. Para ello, tienes que mover la cámara para seguir al sujeto mientras se mueve por el encuadre. Esto puede requerir un poco de práctica para dominarlo. La mejor manera es empezar a seguir al vehículo objetivo en cuanto aparezca a la vista; entonces, una vez que llegue al punto en el que quieres fotografiarlo, pulsa el botón del obturador.
Una vez que puedas hacer un paneo consistente con la acción, puedes comenzar a experimentar con la velocidad de obturación para darle más o menos desenfoque al fondo.
Dispara en modo ráfaga
Al igual que con cualquier fotografía de acción, el encuadre del sujeto depende tanto de la suerte como del criterio. Utilizar el modo de ráfaga aumentará en gran medida tus posibilidades de conseguir una foto decente, con el coche o la moto colocados justo donde quieres que estén en el encuadre.
Inclina la cámara para dar sensación de velocidad
El automovilismo es un deporte rápido y emocionante, así que no tengas miedo de experimentar con ángulos de cámara que reflejen esa sensación de emoción. Inclina la cámara para que el vehículo aparezca en diagonal en la foto: esto hace que aparezca más «al límite» y aporta una dimensión adicional a tus fotos de deportes de motor.
Mira a través de las vallas con una gran apertura
A menos que tengas un permiso de prensa para fotografiar tu evento deportivo, es casi inevitable que te encuentres detrás de una gran valla de seguridad. Esto puede ser una distracción y puede arruinar fácilmente una buena foto, pero por suerte puedes darle a tu cámara «ojos de rayos X» abriendo más la apertura.
Al abrir el diafragma, el objetivo ve efectivamente alrededor de los cables de la malla de la valla, por lo que puedes obtener una foto clara y sin obstáculos de la acción. Por supuesto, el inconveniente de utilizar una apertura amplia es que se reduce la profundidad de campo, pero los coches pasan por el mismo trozo de pista con una consistencia sorprendente, así que esto no debería ser un problema.